Fichas Educativas
Alimentación y consumo de líquidos
La alimentación equilibrada es muy importante para mantener la salud, además ayuda a prevenir enfermedades y lesiones en la piel.
- Para mantener una alimentación equilibrada debemos seleccionar la mayor cantidad de alimentos de la base de la pirámide y una menor cantidad de los que están en la parte alta.
- La hidratación también es muy importante, por lo que se recomienda beber entre 1,5 y 2 litros de líquido al día.
- Tenga presente que hay personas que tienen restricciones para tomar líquidos o alimentos, por lo que en esos casos debe adaptar la ingesta a la recomendación específica.
Consejos para facilitar la alimentación
- Estimule a la persona cuidada a escoger los alimentos para sus comidas.
- Cuando la persona presente dificultades neurocognitivas, se sugiere dar a elegir entre dos opciones o incluso una. Por ejemplo, ¿Prefieres verduras o pollo? O ¿quieres comer pollo?
- La comida se debe ofrecer siempre a la misma hora y en el mismo lugar, evite distracciones o estrés.
- Siga la dieta y las indicaciones que le proporcionan en el Centro de Salud.
- En caso de que la persona no pueda mascar, preocúpese de darle comidas fáciles de tragar.
- Si puede caminar, anime a la persona cuidada para que lo haga antes de comer. Caminar estimula el apetito.
- Distribuya los alimentos en 5 o 6 comidas al día. Sea paciente. Use el tiempo de la comida como una oportunidad de interacción.
- Si la persona cuidada tiene dificultades de visión, coméntele qué va a comer o qué le está sirviendo.
- Disponga los alimentos en porciones pequeñas y córtelos en trozos pequeños, dele el tiempo suficiente para masticar y tragar.
- Si la persona no desea comer, no la obligue, se recomienda esperar 15 minutos y vuelva a ofrecer los alimentos.
Si la persona cuidada ha perdido la sensación de sed y es un día caluroso (30C° o más), dele agua, té frío, infusiones de hierbas, jugos de fruta cocida, de acuerdo a sus gustos.
Consejos de alimentación para personas que se encuentran en cama
- Lave y seque sus manos y las de la persona cuidada. Coloque una servilleta en su mentón para evitar que se manche.
- Ubique a la persona en posición recta (90 grados) para evitar riesgo de broncoaspiración (comida en los pulmones).
- Siéntese cerca de la cama para que la persona pueda verle u oírle.
- Si la persona puede comer por sí misma (incluso con sus manos), no la reemplace.
- No cambie a una dieta blanda por su propia facilidad.
- Al momento de darle alimentos y líquidos, asegúrese que la persona se encuentre despierta.
- Recuerde lavar los dientes después de comer.
- Deje que la persona repose la comida en un ambiente agradable.
- Dedíquele el tiempo necesario y evite las prisas.
Factores que pueden dificultar la alimentación
DÉFICIT SENSORIAL
La alteración de la vista, olfato y gusto, puede limitar o modificar la percepción de los alimentos. Debemos describir el alimento que se sirve y recordar el sabor o el color.
CAVIDAD BUCAL
El mal estado o la ausencia de piezas dentarias, la no adaptación de prótesis dentales y las pequeñas ulceraciones en la boca pueden provocar problemas al masticar, por lo que se debe adaptar el modo y el tipo de dieta a las características de cada persona.
DISFAGIA
Es la dificultad para tragar alimentos y líquidos. Si la persona tiende a atorarse, suspenda la alimentación y estimule la tos. Los líquidos deben darse asegurándose que la persona está sentada y despierta. Solicite apoyo e información en su Centro de Salud.
HÁBITOS DIETÉTICOS INADECUADOS
Siempre debemos tener en cuenta el diagnóstico, las recomendaciones nutricionales y las preferencias de la persona cuidada, pero el limitarse solo a algunos grupos de alimentos puede provocar malnutrición. Por ello conocer cuál es ladieta adecuada en cada caso permite prevenir enfermedades como obesidad o diabetes, o evitar la agudización de la condición existente.
ADAPTE SU VAJILLA
Use platos que no se rompan, vasos con tapa y bombillas para mantener la independencia.