Acostada en su cama, acompañada por su hija, quien es su cuidadora principal, la señora María (95) nos relata, con buen semblante, aspectos de su vida. María Muñoz, mujer mayor en situación de dependencia y Vany Bataller (65), quien le provee cuidados, son beneficiarias del Programa Red Local de Apoyos y Cuidados desde los inicios de éste en 2017.
Vany cuida desde el año 1971. Cuidó a su padre y hermana con una discapacidad intelectual, ambos ya fallecidos. “Luego de la muerte de mi hermana, recibí ayuda del Programa. Me han prestado mucha ayuda. Nosotras estamos desde hace tiempo en el Programa. Que venga una niña (Asistente de Cuidados) es tremendo aporte. El Programa es bueno porque una pasa sola y con las visitas, las capacitaciones una conversa, tiene contacto con otras personas”, reconoce Vany.
Ambas viven en la comuna de Talagante, en la Región Metropolitana, en una casa de dos pisos. La señora María yace en un catre clínico, ubicado en el living de la casa. Mira hacia una ventana pequeña. La vivienda no tiene espacio arriba para tener a María. Aun así, al estar en el primer nivel, le facilita las labores de cuidados y del hogar a su hija: hacer la comida y supervisar a su madre, por ejemplo.
“Mi madre no permanece todo el día en cama. Yo la levanto. Mi madre juega dominó, a las cartas, lee, come sola. La hago pararse derechita y sentarse 10 veces; luego la saco en la silla a la plaza del frente”, expone Vany para contarnos que las labores de cuidados que realiza implican actividades variadas para su madre.
Los servicios que han recibido son Atención Domiciliaria, ayudas técnicas, silla de ruedas, audífonos e insumos de cuidados. Además, recibe la visita de kinesiólogo, terapeuta ocupacional, podólogo y psicólogo.
“Mi comida favorita es un buen plato de cazuela”, enuncia con buen ánimo, María. Quien también reconoce que le gustan los porotos con riendas. María también nos cuenta cómo se lava a diario. “Me limpio el cuerpo con toallitas húmedas”.
María usa pañales los que en su mayoría son costeados por Vany. “Compro seis paquetes de Cotidian. Lo mismo que las sabanillas que también hay que comprárselas a parte. Recibir esos productos es una gran ayuda, porque gasto mucha plata en pañales”.
María muy emocionada nos cuenta que nunca había ido a la playa, lugar que visitó por primera vez gracias al Programa Red Local de Apoyos y Cuidados, en una salida para cuidadoras: “El paseo fue muy lindo. Vi tantas cosas preciosas que no había visto nunca. El mar, nunca lo había visto. Para mí fue algo tremendamente bonito”.